Mi secreto para decoloraciones extremas sin miedo: Acromaplex 9 Tonos
Como técnica en color y estilista profesional, una de las decisiones más críticas que tomo en mi trabajo diario es qué decolorante usar. No es solo una cuestión de aclarar: es una cuestión de respetar el cabello, de protegerlo, de potenciar su belleza sin llevarlo al límite. Y por eso, mi elección es clara: Acromaplex 9 Tonos con tecnología Blondaplex incluida.
No te voy a mentir, he probado muchos decolorantes. Algunos aclaran bien, pero castigan la fibra. Otros prometen cuidado, pero se quedan cortos en resultados. Con Acromaplex, encontré ese punto medio soñado: aclaración extrema con control, fuerza y confianza.
¿Qué hace diferente a Acromaplex? Todo. Pero si tuviera que empezar por algo, sería esto: multiplica hasta 7 veces los puentes cistínicos del cabello. Sí, leíste bien. No solo protege, reconstruye durante el proceso. Esto es vital cuando trabajo con melenas que ya tienen historial químico, porque puedo llevarlas a rubios fríos, beiges o platinados sin miedo a romperlas.
La tecnología detrás del resultado Este no es un polvo cualquiera. Es un polvo blanco, lo que significa que tengo mayor precisión visual y menos sorpresas al aclarar. Pero además, está cargado de activos que hacen la diferencia:
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Aceite mineral: estabiliza y cuida la fibra capilar.
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Ácido Maleico: actúa dentro del tallo capilar, creando una estructura más fuerte y uniforme.
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Niosoma de isoflavoma de soya (Tecnología Plex): un escudo protector real que recubre la fibra capilar de raíz a punta.
¿Tiempo de pose? Más tiempo, mejores resultados. Y esto es algo que valoro muchísimo: por ser rico en aceites especializados, puedo extender el tiempo de exposición sin comprometer la salud del cabello. Eso me da un control total sobre el proceso, especialmente cuando estoy buscando rubios perfectos, sin manchas ni parches.
"Si el cabello ya está decolorado, no lo dejo en manos de cualquier polvo. Confío en Acromaplex porque no solo aclara, también fortalece."